sábado, 12 de abril de 2008

Darma de la palabra

Quizá las palabras nunca sean suficientes
para expresar lo que el silencio clama por deletrear.
Tal vez el verso se pierda en la memoria
pero en el tiempo jamás.
El verso perdura como los cielos y como la tierra
el verso se mece en el vacío
como repitiendo en écos
que nuestra alma está llena de excelsos vinos
envuelta de colores
lléna de matízes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me gustó así como algunos otros de tus escritos, creo q seguire dandome vueltas por aquí

saludos